América elimina a Pumas
Ese tiro del delantero paraguayo dio pie a justificar su presencia en el futbol mexicano. Gris, opaco, sin mayor chispa durante el torneo regular, no había dado rasgos de ser un futbolista digno de enfundarse en la camiseta felina. Una anotación le sirvió para enorgullecer a sus seguidores de contar con él.
Era el minuto 21, apenas del partido de vuelta de los cuartos de final. Robin, el que fue llamado como el «sucesor de Salvador Cabañas», emparejó el tanto de visitante que las Águilas habían logrado en Ciudad Universitaria el miércoles pasado.
Pumas, entonces, se envalentonó. Sabedor de que sólo necesitaba un gol más para avanzar a la siguiente ronda se fue con más pundonor. Se mostró opuesto a lo que dejó de hacer en su cancha. Garra, espíritu, fiereza fueron sus características para buscar esa diana que les daba el boleto a semifinales.
América, temeroso. Pálido, frágil, nervioso. Ni siquiera el tanto de la igualada de Christian Benítez (53′), que se ha convertido en el verdugo de los universitarios en los últimos duelos, pudo hacerlos creer en sí mismos a los amarillos.
El mismo delantero ecuatoriano se «comió» el sello a semifinales al fallar un gol de rutina, hecho, luego de una magistral asistencia de Christian Bermúdez.
«Chucho» tuvo su desquite en tiempo de compensación. Un contragolpe y adiós a Universidad con el gol del triunfo.
